El miedo es una emoción inherente al ser humano. Está ahí desde que nacemos hasta el mismísimo día de nuestra muerte. Por ello, se antoja muy importante saber convivir con él y aceptar que siempre nos acompañará en cualquier decisión que tomemos. Por eso, aunque en ocasiones este sentimiento nos desborde, es importante aprender a vencer el miedo para que este no nos paralice.
Sentir miedo no es malo. Esta emoción suele activarse cuando estamos ante una situación de peligro. El problema es que, en ocasiones, es irracional. Es decir, no es un miedo real. Sentir temor a hablar en público o a la posibilidad de que una relación se rompa es fruto de inseguridades. Aunque, también, probablemente estén actuando determinadas creencias que será necesario cuestionarnos.
“Nunca dejes que el miedo sea tan grande que te impida seguir adelante”
-Anónimo-
Considerando una reflexión de Isaac Asimov en su libro «100 preguntas básicas sobre la ciencia» “una hormiga nace en mitad de Estados Unidos y camina en la misma dirección todos y cada uno de los días de su vida, y preguntamos a esa hormiga ¿qué hay más allá de la tierra? el día antes de morir, esta respondería «No tierra«.
Digamos que si no imposible, sería altamente improbable que la hormiga hubiera respondido -el mar, ¡está claro!-. Y es que no podemos saber que hay más allá de lo que conocemos. Sin embargo, el camino hacia dicho conocimiento es en ocasiones tan sencillo como ir, y descubrirlo.
¿Qué hay después del miedo? Nadie tiene miedo a algo que ya ha hecho, ¿verdad? Obviamente para descubrirlo hay que pasar por el, hay que tener miedo, y superarlo. Como diría nuestra querida hormiga, después del miedo hay «No miedo«. El miedo es un mecanismo de defensa ancestral.
Para vencer al miedo, sólo tienes que saber convivir con él y controlarlo cuando realmente sea necesario. Ahí las pregunta lógicas, ¿Cómo podemos vencer el miedo? ¿Y qué hay que hacer para controlarlo?
No hay una fórmula definitiva para vencer al miedo, sin embargo herrera propone algunas claves que parecen muy asertadas.
- No escapes del miedo: huir no es una buena idea porque aquello que temes no desaparecerá por sí solo a menos que lo mires, reflexiones sobre ello y descubras la mejor solución para afrontarlo.
- Acéptalo, no lo niegues: si no aceptas que tienes determinado miedo, difícilmente podrás ponerle fin. Pues, es necesario que sepas mirarte, observar aquello que te está pasando y admitirlo. Sin este paso, no podrás avanzar.
- Enfréntate a lo que te hace sentir miedo: como lo oyes. No importa el miedo que tengas a que la ansiedad haga acto de presencia o a que empieces a ponerte muy nervioso. Tienes que superar ese miedo y para ello tienes que sentirlo. Una vez estés en la situación piensa en por qué tienes ese miedo, ¿te va a pasar algo malo de verdad? ¿Estás en peligro real?
Por último, el film Piper ganó el Oscar a la mejor película animada. Solo dura 5 min. Aunque el director tardó 3 años en terminarla. L importante es que la película muestra cómo cambia nuestra vida cuando enfrentamos nuestros miedos. Y es la prueba de que las cosas siempre se pueden hacer mejor, depende de que lo queramos hacer
Piper –
Fuente:
“Blog posts”, Nov 19 2014, “¿Qué hay después del miedo?” Recuperado de http://nosolocoaching.com/
Pena Herrera B, Marzo 18 2020, “¿Cómo podemos vencer el miedo?”, recuperado de: https://lamenteesmaravillosa.com/