La propiedad intelectual es un mecanismo de protección de las creaciones de la mente.
A través de este mecanismo se pueden proteger cosas como invenciones, como obras literarias, obras cinematográficas, variedades vegetales. Y por supuesto, también los símbolos o imágenes que son utilizadas en el comercio.
En el caso específico de agroindustria, son cuatro figuras las que tienen mayor relevancia en el tema de propiedad intelectual.
Estas son:
- Las patentes,
- los derechos de obtentor(1),
- las marcas y
- denominaciones de origen.
(1) En la Ley Federal de Variedades Vegetales, un obtentor se define como una persona física o moral que mediante un proceso de mejoramiento haya obtenido y desarrollado, una variedad vegetal de cualquier género y especie.
Patentes
Iniciaremos definiendo qué es la patente.
Una patente es el derecho exclusivo que concede el Estado para que un individuo o una empresa explote de manera exclusiva una invención. Una invención se refiere a transformar la materia y la energía.
Para que una patente pueda ser concedida se requiere que una invención cumpla con al menos tres requisitos.
- El primero es que esa invención tenga novedad universal. Eso significa que antes de someter una solicitud de patente no se conozca nada al respecto en el mundo entero.
- El segundo requisito es que esa invención tenga una actividad inventiva. Esto quiere decir que no sea algo obvio para un experto en la materia.
- Y el tercer requisito para tratar de obtener una patente es que la invención tenga una aplicación industrial.
Las patentes están relacionadas con la protección de equipos. Como podría ser por ejemplo una cosechadora.
Con procesos. Por ejemplo un proceso de fermentación de cacao. O bien con un producto.
Derechos de obtentor
El segundo título de propiedad intelectual que vamos a definir es lo que se conoce como derechos de obtentor. Los derechos de obtentor es un sistema de protección de obtenciones vegetales. Es una forma de derecho de la propiedad intelectual para proteger a aquellos que generan variedades vegetales.
Al igual que en las patentes, en el caso de los derechos de obtentor se requiere cumplir con una serie de requisitos para poder obtener un título de obtentor. Estos cuatro requisitos son los siguientes:
- El primero es que la variedad vegetal sobre la cual se requiere o se solicita una protección es que sea nueva. Esto significa que por lo menos durante un año previo a la solicitud de la variedad vegetal no se haya comercializado.
- El segundo criterio es que esta variedad vegetal sea distinta. Con ello queremos decir que al menos una característica sea diferente de las otras variedades que se conocen hasta ese momento. La característica puede ser altura, puede ser madurez, puede ser color, o inclusive olor.
- La tercera característica se refiere a la uniformidad de la variedad vegetal. Esto significa que la característica que se presente en una planta también se debe presentar en la segunda, en la tercera, en la cuarta. Es decir, en todas las plantas que conforman una población.
- Y la cuarta característica es que la variedad vegetal sea estable. Eso significa que la característica de la planta esté determinada genéticamente. Con eso se garantiza que las características diferentes se manifiestan de una generación a otra.
Denominación de origen
El tercer título de propiedad intelectual de suma relevancia cuando hablamos de cuestiones agroindustriales. Se refiere a la denominación de origen. La denominación de origen es un signo que se utiliza para caracterizar productos que tienen cualidades muy específicas. Y relacionadas con el medio ambiente.
Tenemos ejemplos en México de denominaciones de origen conocidos por todos nosotros. Como es el tequila y el mezcal. Son productos agroindustriales cuyas características se derivan del suelo en el cual se cultiva el agave. Del sol que reciben estos agraves y de la manera en que se cultivan.
Las Marcas
Por último, el cuarto título importante dentro del tema de propiedad intelectual aplicado a la agroindustria lo constituyen las marcas. Una marca es un signo distintivo que permite a los consumidores diferenciar productos o servicios de una empresa a otra.
Los consumidores buscamos las marcas de productos o servicios porque nos garantizan un precio, una calidad, o bien otras características.
El titular de una marca confiere a su titular el derecho exclusivo a explotarla. En el caso de productos agroindustriales, y tomando como ejemplo el caso del tequila. Podemos observar que no solamente está protegido por la iluminación de origen sino también marcas.
En el mercado encontramos múltiples marcas que las empresas utilizan. Para que el consumidor pueda encontrar en el mercado el producto que desea.
La importancia de la propiedad intelectual radica justamente en crear un marco de referencia. Para proteger a aquellas personas que se caracterizan por generar cosas nuevas.
Sea un símbolo, sea una variedad vegetal, sea una invención, la ley los protege y evita que alguien sin su permiso pueda hacer uso indebido de todos estos títulos que hemos mencionado.
Con ello también quienes poseen un título de propiedad intelectual pueden obtener ingresos a partir de ellos. Ya sea a través de regalías, porque comparten con alguien más sus creaciones, o bien porque las venden.
Es importante mencionar que al menos en el caso de estas cuatro figuras que hemos visto, pueden coexistir. Y un sólo producto puede tener una denominación de origen, una marca, una patente, o bien un derecho de obtentor.
Con lo cual se fortalece el sistema de propiedad intelectual y a quienes son creadores de todos esos elementos. También les dan una posición mucho mejor en el mercado.
Fuente: Curso Innovacion Agroalimentaria UNAM, curso fue desarrollado por el Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA) en colaboración con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM)